... quisiera saber qué puedes hacer con ella...

sábado, 11 de mayo de 2013

Jugando a querer... de lejos

Hola!... un hooola a toda mi gente bella que tenía olvidados... es que han pasado tantas cosas que casi me olvido de respirar. Mucho que contar, mucho tiempo sin escribir.

Escucho a Barry White de fondo, me gustan sus temas, son... candentes, pasionales, amor y sexo... la mezcla perfecta...

Les contaré que después de arrancar del compromiso, llegamos a un acuerdo... nos vamos a querer, sólo querer, y hoy con mi pololo (como decimos acá) nos queremos... nada más... pero estamos lejos.

Respecto a eso nació la idea de hablarles de un tema que me complica, las relaciones a distancia.

Cuando era niña mi primer pololo se fue lejos por cosas de su familia... todo fue muriendo hasta desfallecer como manzana podrida. A los años después conocí a un tipo de otra ciudad a dos horas de viaje de la mía... aguanté lo más que pude, pero a los 6 meses nada ni nadie pudo darme lo que necesitaba mi corazón, y todo se fue a la mierda.

Recuerdo haberlo pasado mal tratando de hacer durar algo que no servía, tratando de dar de mí, intentando resucitar algo que ya estaba muerto... tanto que me convencí de que las relaciones a distancia no eran para mí. No digo que otros no puedan, pero yo... no.

Así fue como a finales del año pasado aparece un hombre muy cara dura ofreciéndome un amor a distancia; y a mi edad, independiente de que existia ya un cariño creado por una amistad previa que manteníamos, le dije "amigo, no gracias". Pero mi corazón estúpido ya estaba cagándome la vida haciéndome ser una más de esas mujeres tontas que andan mandándose cagadas una y otra vez... y después de muchos gestos de cariño y un período de conquista de él hacia mí... terminé cayendo como imbécil en las redes de un amor a distancia... sí, una vez más, y dije "ok, bueno ya".

Hay un dicho que dice así "amor de lejos, amor de pendejos", u otro que dice "amor de lejos... felices los cuatro"... mmm... no sé cuál me da más ánimo para seguir poniéndole empeño a esta relación que tengo actualmente. Da una pena enorme saber que nadie apuesta por nosotros, pero saben qué?, mis primeros meses de relación hicieron que casi casi me convencieran de todo eso, pues fueron pencas... así tal cual, pencas. Si hoy aún estoy con este hombre, es sólo porque viví un proceso de ceguedad absoluta que me impidió terminar con él. Y por qué tanto, se preguntarán Uds.?... por qué tanto deseo de terminar la relación?... pues porque ni una pisca de lo prometido por él cuando me conquistó lo estaba cumpliendo; todas las palabras lindas se las había llevado el viento, todos los gestos románticos se enterraron en una cueva, y todo lo cariñoso que había sido para conquistarme desapareció por arte de magia. Y cuando él estaba allá en su ciudad, trabajando cada día... yo estaba acá en mi cuidad sola, con sólo unas cuantas palabras de él al día, y con sus quejas constantes porque yo alegaba... pidiendo atención y cariño. Si, fueron meses en que debí terminar con él, pues no me daba el cariño y la atención que yo deseaba de un hombre, y tampoco estaba para mí físicamente.

Llegaba los fines de semana, y todo era perfecto... teníamos sexo con las ganas que tienes cuando lo has esperado una semana entera o dos... sexo rico, sexo... puro sexo; y luego de eso salíamos a comer rico o beber y pasarlo bien. Sí... lo pasamos bien juntos, no lo niego, pero no sólo sexo y pasarlo bien busca una lady como yo. A esta altura de la vida yo también busco amor... aunque arranque aveces de él. Si yo me había embarcado en esto por él, él tenía que cumplir.

Así es como después de muchas peleas y malos momentos, hemos llegado al día de hoy, en que llevo una semana aprox. siendo tratada como reina por él. Y la verdad no sé ni cómo pasó, ni cuánto durará, pero el cabro está entusiasmado conmigo, se le nota... esta vez sí se le nota, como cuando me conquistó. Al respecto tengo algunas teorías de por qué el cabro despertó, pero la que más se me ocurre que puede ser es... que pilló en mi celular mensajes de un tipo que quiere juntarse conmigo, que vive cerca mío, y que ya tuve algo con él antes... se puso tan celoso que me hizo escándolo grande gigante... después de eso, todo cambió... pero claro, antes también tuve que aguantar que me dijera un par de cositas poco bellas, de las cuales no se iba a disculpar.

Ese hombre que me escribe es un tipo con el que no tuve nada serio, sólo sexo, fue una especie de aventura sexual... y quedó tan enganchado de mí que a los años aún me busca, y me invita a su departamento; pero como yo soy fiel (y no lo digo en forma irónica) no voy nunca. Este tipo me escribió una mañana mientras yo estaba en la ducha y mi pololo tomó mi celular y en un acto anti libertad me leyó todo... malo está eso, lo sé, pero dejaré pasar eso por esta vez, mientras no hayan más próximas. La cosa es que cuando salí de la ducha lo vi y me dió una especie de escalofrío que sentí avanzar desde los pies, por mi columna, hasta mi cabeza... y supe inmediatamente lo que pasaba, sabía que él había hecho; porque una sabe lo que hace, y sabe que cuando se juega con fuego, una se puede quemar en cualquier momento... el momento había llegado.

Yo reconozco que jugué con fuego, porque este tipo me escribía y yo le seguía el juego; sólo por ego, sólo por jugar... y porque, para ser bien sincera, estaba taaaan mal con mi pololo que me dije que no tenía por qué espantar a nadie de mis jotes si en cualquier momento terminaba mi relación. Sentía que no me querían como yo quería, y por eso no me quise comprometer en serio, y por eso... seguí jugando con fuego, hasta el punto que casi casi me junté con este tipo a tomar algo... y después no sabríamos qué pasaría por supuesto... casi casi pequéeeee, porque a última hora las cosas no se dieron. Yo estuve dispuesta a cagar a mi pololo, estaba aburrida de la relación, y por primera vez le pondría el gorro a alguien quizás (porque jamás cagué a una pareja), pero no resultó... por algo será no?. Así que cuando mi pololo encontró un mensaje de este tipo invitándome a su depto porque estaría solo... se enojó, y yo... asumí. Asumí el hecho que debí cortarlo y no lo hice. Obviamente no le dije que casi casi me junté con él, pero supo casi todo... casi; y el susodicho que me invitaba a su depto se tuvo que ir al tarro de los recuerdos hot nada más que tengo en mi cabeza loca... hasta que vuelva a estar soltera (obvio, no para siempre, no hay para qué torturarse).

Después de este hecho crítico casi terminamos la relación (una vez más de varias ocasiones en que casi casi terminamos la relación), porque él se dolió... y yo le dije que me tenía botada como por 88348978475776876706965' vez más (a ver si esta vez escuchaba mis necesidades) y parece que recién el hombre cachó; porque recién, después de cuatro meses casi cinco de relación, me está haciendo sentir amada. Mmm... sé que es harto tpo, pero ni yo sé cómo aguanté tanto, casi peco incluso, pero aquí estoy de pie... y con ánimo de creerle a este hombre una vez más. Ahora me están llegando mensajes suyos al celular, cómo se nota que ha cambiado, y yo aún no sé por qué tanto cambio... será eso?, quién sabe... pero al menos sucedió. Como dice un dicho por ahí "más vale tarde que nunca".

Eso sí, tengo claro que si esta vez no resulta la cosa, tendré que dejar todo hasta ahí, porque tanto intento sin frutos dejará secas las raíces... espero no sea el caso y todo siga bien. Más adelante les contaré algunas cosillas locas que he hecho... espero seguir escribiendo más seguido.








Un beso... donde más te guste.